23 de septiembre de 2012

Ein deutsches Requiem




 Ya desde el propio título el Requiem Alemán de Johannes Brahms es una obra que no pasa desapercibida. Contemporánea en el tiempo de obras como Los maestros cantores, de Wagner, o Boris Godunov, de Moussorgsky, se trata de una obra sinfónico-coral, con dos solistas vocales, barítono y soprano, que rehúye los cánones del réquiem católico que podemos encontrar en otros compositores, ya sean latinos como Verdi o Berlioz, ya centroeuropeos como Mozart o Bruckner. En alguna ocasión Johannes Brahms había dejado claro que para él se trataba, más que de un réquiem alemán, de un réquiem humano, donde los textos bíblicos de los que se sirve le valen más por su valor poético que otra cosa. En cualquier caso se trata de una concepción que parece entroncar más bien con una concepción luterana del sufrimiento humano en la tierra. En cualquier caso está claro que hablamos de una obra sacra, pero no de una obra litúrgica. 

Como bien puede verse (y oírse) en los vídeos que adjuntamos se trata de una obra de grandes dimensiones. Por un lado la interpretación demanda de un gran efectivo orquestal, al que tiene que acompañar un coro capaz de responder al volumen que genera la orquesta, pero también capaz de resistir las dimensiones de una obra que puede llenar por sí sola el programa de un concierto, y donde el coro apenas tiene momentos de descanso.  

Los dos primeros vídeos que teneis aquí abajo corresponden al número 2 del Requiem Alemán. Supongo que están divididos en dos vídeos por alguna cuestión de youtube, pero conviene escucharlos seguidos. La primera parte es una marcha fúnebre donde el papel de timbal adquiere casi el de un solista al que acompañan la orquesta y un coro que sigue a su vez las evoluciones de la orquesta. El  movimiento está concebido en dos partes, siendo la primera una parte lenta, la marcha fúnebre de la que hablaba antes, y una segunda parte (el segundo vídeo) que está escrita en mayor y donde se habla de la futura resurrección.




Siempre digo que ninguna grabación puede sustituir a la verdad de un concierto en vivo. Lo cierto es que no hay muchas ocasiones de escuchar una obra así, pero si alguno tiene esa suerte alguna vez y el percusionista ha hecho bien su trabajo, por favor aplaudidle a rabiar porque es posible que con ninguna otra obra haya sudado tanto, más que nada porque nunca habrá marcado nadie de esa manera el ritmo que desde los vivos atribuimos a la muerte.

Seguimos ahora con otros dos vídeos que corresponden al número 6. Otra vez el que lo ha subido a youtube lo ha dividido en dos vídeos, pero los que han llegado leyendo hasta aquí saben que conviene escuchar uno tras otro. De nuevo Brahms construye un número de dimensiones y estructura que podríamos llamar colosales. Todo cuanto ocurre desde el primer acorde va, de una u otra manera, encaminado hacia la fuga final. La entrada del coro utiliza un texto de la primera carta de san Pablo a los Corintios, donde revela el misterio que no vamos todos a morir, sino que vamos a cambiar, a ser otros. Religiones y creencias aparte, el lector no me negará una cierta belleza en una idea así. Las apariciones del barítono nos hablan del juicio final y van aumentando el dramatismo que va a culminar con la fuga del segundo vídeo. El tema es expuesto por las mezzos, después por las sopranos, siguen los bajos y finalmente los tenores. Ya al final del tema de los tenores (segundo 50) puede escucharse por primera vez la escala ascendente de los metales que va a acompañar esta fuga hasta el final, y que escucharéis muy claramente en el minuto 3:01 por ejemplo, o en el 4:04. La primera vez que escuché esta obra fue en Madrid con la Orquesta Nacional y el Orfeón Donostiarra, y por alguna razón esta escala ascendente de los metales se me quedó grabada en medio de la fuga. Algún día, partitura por delante, debería intentar buscar las respuestas a esta pregunta.




Si alguno tiene tiempo y se queda con ganas le animo a seguir escuchando la obra entera. En youtube puede seguir buscando esta misma versión, que es de la orquesta y coro de la Radiodifusión de Baviera, dirigida por Mariss Janssons, un maestro al que personalmente le tengo entre los mejores, siquiera porque me ha hecho disfrutar de algún que otro gran momento mágico con la orquesta del Concertgebouw de Amsterdam, que es la otra de sus orquestas habituales. Tambien he encontrado en la wiki un diagrama muy bueno con las tonalidades y el origen bíblico de los textos que atraviesan la obra.


Y ya para terminar, no el final de este Requiem Alemán, sino el último número que Brahms añadió a la obra. Se trata del número 5 que pone en voz de la soprano solista, un número que Brahms compuso tras la muerte de su madre. Aquí lo escuchamos en la versión que cantó Lucia Popp dirigida por Sinopoli, y yo me quiero acordar aquí del programa de radio donde lo escuché por primera vez; era un programa inolvidable de Radio 2 (entonces se llamaba así) que presentaba mi siempre admirado José Luis Téllez.




16 de septiembre de 2012

Vicente Pradal




El señor de la fotografía se llama (se llamaba, que murió en 1965) Gabriel Pradal. Viene a este blog a cuento de una noticia aparecida en Público que recuerda un hecho bastante conocido entre los exiliados españoles en Toulouse. Se trata de la recuperación de un busto de Pablo Iglesias, que fue enterrado en el parque del Retiro de Madrid en 1939, y que no fue recuperado hasta 1979. La familia Pradal había guardado en secreto los planos del lugar exacto donde estaba enterrado ese busto de Pablo Iglesias, y no la hizo pública hasta 1979, cuando ya en España “reinaba” una nueva democracia.

Si vengo aquí con todo este cuento no es para hablar de la importancia que pueda tener ese busto, algo que desconozco por completo, sino porque mientras la noticia habla del dichoso pedrusco, omite ciertas informaciones sobre la familia Pradal que bien hubieran merecido unas líneas, siquiera por dar un poco a conocer en España la figura de Gabriel Pradal y algunos de sus descendientes. Hace mucho que pienso que una parte de la Historia de España pasa por la historia personal de tantos y tantos exiliados del siglo XX, algo que una y otra vez veo negado en la vida española. Lamentablemente esta noticia es solo un pequeño ejemplo más.

Gabriel Pradal, hasta donde sabemos, nació en Almería y marchó, no con pocos esfuerzos económicos por parte de su familia, a Madrid a estudiar arquitectura. Allí adquirió un compromiso político que le ligó al socialismo y se convirtió en un arquitecto con un cierto prestigio profesional. En el año 1936 Gabriel Pradal era diputado socialista por Almería, tuvo una actividad importante durante la Guerra Civil (cuando empezaremos a llamarla simplemente Guerra de España?) y acabó marchando al exilio. Después de muchas vicisitudes la familia Pradal, que había salido de España separada, cada uno saliendo como pudo, consiguió reunirse en Toulouse en julio de 1939. Como he dicho antes él era arquitecto además de diputado, pero el título de arquitecto no le fue reconocido en Francia y tuvo que (mal)sobrevivir como delineante.



Uno de sus hijos, Carlos, que aparece arrodillado en la fotografía que ilustra el artículo de Público, y que había llegado a Francia como niño después de mil y una aventura, se convirtió en un pintor que ha dejado una obra importante. Tan importante como seguramente desconocida en España. A su vez Vicente Pradal, un hijo de Carlos es un artista que ha trascendido el mundo del flamenco para crear su propio mundo. En este vídeo, fragmento del film Passer la frontière de Neus Viala, podeis escuchar al propio Vicente Pradal hablar de él y de su familia, así como escuchar algunos fragmentos de espectáculos que él ha creado. También podéis ver rápidamente algunas pinturas de su padre Carlos.


El caso de Vicente es digno de mención especial. Por su origen es bisnieto de don Antonio Rodriguez Espinosa, un nombre que dirá mucho a los lorquianos, pues fue el maestro de García Lorca en Fuente Vaqueros. Nacido en Francia, pero hijo y nieto de exiliados que, como él explica, lloraban literalmente por el recuerdo de esa España perdida a la que no podían volver. Que su trabajo hunde raíces en la cultura española y en el flamenco en particular es evidente. Pero el trabajo de Vicente Pradal huye de cualquier etiqueta conocida que podamos poner, porque simplemente su obra es personal y, como los grandes artistas, es también un trabajo inclasificable. Es simplemente Vicente Pradal. En este otro vídeo, de un concierto en vivo, se puede ver a Vicente con sus dos hijos, Rafael al piano y Paloma al cante. Son dos jóvenes de menos de veinte años en este vídeo, pero que prometen y mucho.


Para terminar, una canción extraida del Diván del Tamarit, un espectáculo del que lamentablemente no encuentro videos en youtube para subiros, pero un espectáculo que me abrió los ojos sobre Vicente Pradal. Se trata aquí del poema La monja gitana.


Y ya para terminar una lamentable curiosidad: no hace mucho aparecía una pequeña reseña en El País donde se mencionaba a los españoles que habían trabajado en la Comedie Française. La noticia omitía descabelladamente a Vicente, que no hace tanto tiempo montó Yerma llenándola de una música que sale literalmente de los versos de Lorca.


9 de septiembre de 2012

Suscripción al film Contre les murs




El vídeo que encontráis arriba es un fragmento del film de Neus Viala “Azaña, une vie pour la Republique”, un documental que, desde mi punto de vista, debería ser de proyección obligada en los colegios españoles, así en los públicos como en los privados pagados con fondos públicos y donde a veces se segregan niños de niñas.

Hace casi dos años tuvimos ocasión de hablar con Neus Viala, que se encontraba entonces en plena campaña de promoción de este film, que acababa entonces de recibir un premio en Alcalá de Henares. Ahora nos ha llegado información de un nuevo proyecto en el que anda metida y para el que necesita nuestra ayuda. El proyecto se llama “Entre les murs”, título que no necesita mucha traducción al castellano y que se refiere específicamente al centro de internamiento de Cornebarrieu, junto a Toulouse. Pero la denuncia de Neus es más genérica: se trata de mostrar como, condicionado por las directivas europeas, la aplicación de la nueva legislación en Francia conducen a condiciones inhumanas que no son admisibles. Existe una opacidad deliberada sobre el funcionamiento de los llamados Centres de Rétention Administratives, lugares siniestros que no son más que antecámaras de la expulsión.  Estos lugares son inaccesibles para autoridades y periodistas, como denuncia Neus Viala en su film. Si hace setenta años algunas familias francesas lucharon para ayudar con sus medios a los refugiados republicanos que eran mantenidos en campos de concentración, ahora hay familias que ayudan también incluso animando a los “retenidos” (no confundir con delincuentes) en las escasas visitas permitidas. Lamentablemente en España no es mucho mejor.

Neus Viala está buscando suscriptores, a partir de 15 euros, para este proyecto. Entre otras cosas recibiréis el DVD cuando el film esté terminado. Podeis encontrar más información en la página de la productora Cultures et Communication.



2 de septiembre de 2012

Calle Vicente Lopez Tovar




La ciudad de Toulouse decidió en mayo de 2010 dedicar una calle a Vicente López Tovar, militar republicano español, exiliado y reconocido luchador en la resistencia francesa. Fue nombrado caballero de la Legión de Honor por el Gobierno francés, y detalles de su biografía pueden encontrarse en este enlace.

Vicente López Tovar fue además el encargado de dirigir en 1944 la invasión del valle de Arán, una operación militar que pretendía llamar la atención de las potencias aliadas para entrar en España y acabar con la dictadura de Franco. Esta operación ha sido novelada hace un par de años por Almudena Grandes en Inés y la alegría, donde se recogen con fidelidad muchos detalles de esta invasión y, en general, de la vida del exilio español en Toulouse.

Ayer se celebró la inauguración oficial de la calle Vicente López Tovar, acto en el que estuvo representado el alcalde de Toulouse (del PS), donde estuvo la oposición (UMP, de derechas) y dos miembros de la Asamblea Nacional. Hubo una intervención de Henry Farreny, que glosó la vida y el carácter republicano de López Tovar, así como unas palabras emocionadas de su hijo. No faltaron las banderas republicanas y, mientras sacaba algunas fotos, yo reflexionaba sobre lo que estábamos viviendo con absoluta normalidad. Mientras en España un juez es capaz de condenar a un joven por enarbolar la bandera republicana, aquí en Toulouse es absolutamente normal situar al mismo nivel las banderas francesa y republicana en un acto oficial. Eso por no hablar de lo que significa dedicar una calle a un militar republicano.

Yo se que muchos pueden leer esto y pensar que todo son cosas de ayer y que hoy hay otras urgencias, así sean los recortes sociales como la creación de esa macroagencia inmobiliaria que llaman banco malo y con la que van a esquilmar a los españoles. Uno piensa en todo eso desde Francia y ve las diferencias a veces abismales entre un país y otro, y uno piensa que, entre esas diferencias un país es una república y el otro una monarquía. Y a lo peor tiene algo que ver. 



 


Dos generaciones de militares se juntaron en el evento. De qué hablarían?


Discurso por parte del representante de P. Cohen, alcalde de Toulouse


Herny Farreny, de la Amicale des Anciens Guerrilleros Espagnols

Y ya para terminar, vuelvo a colgar un diaporama que publiqué en su día sobre la fiesta republicana de 2006 en la plaza del Capitole de Toulouse