16 de diciembre de 2012

Lislevand - Akchoté: la crónica




El vídeo que puse en la entrada anterior, y que ahora vuelvo a colgar, es un concierto de Rolf Lislevand y Noël Akchoté, en una grabación de France Musique, que para entendernos es en Francia lo que es Radio Clásica en España. La iniciativa de France Musique es de agradecer, por lo que tiene de poder escuchar un concierto gratuito y sin publicidad. Pero el concierto admite algunos comentarios que me apresto ahora a publicar, cosa que no hice por pereza la semana pasada.

Lo primero que me llama la atención es la mezcla de una música renacentista por parte de Rolf Lislevand, con el jazz de Akchoté. El choque para mí no está tanto en los estilos, sino en la necesidad del segundo de utilizar altavoces para que se escuche su música, mientras que Lislevand es fundamentalmente un músico acústico y sus interpretaciones pierden muchísimo si se pone un altavoz de por medio. Esto que digo debe ser mucho más acusado en el concierto en vivo, pero incluso en la grabación se escucha una diferencia de sonido que a mí me choca más todavía que la diferencia de estilos. Ya sé que se me nota mucho, pero mis preferencias siempre van por donde está lo acústico antes que lo amplificado electrónicamente, que siempre me parece más adulterado.

Vamos ahora con la música en sí misma. Si bien es verdad que estoy lejos de ser un entendido en todo lo que se refiere al jazz, puedo presumir de un cierto bagaje a mis espaldas que me permite identificar un buen músico de otro que no lo sea tanto. De Lislevand tengo poco que decir, porque sus interpretaciones de música renacentista ya lo dicen todo. Creo que cualquiera a quien le guste la guitarra disfrutará de sus interpretaciones con todo lo que sea de cuerda pulsada. En este concierto se le escapa alguna morcilla, algo que yo perdono sin ningún problema a un intérprete de su sensibilidad. Id a la pieza que toca en el minuto 25:30, con las variaciones hiperconocidas a partir del 28:20, y recrearos un rato que merece la pena.

Ahora viene la otra parte, Noël Akchoté. Es la primera vez que le escucho pero me costará volver a hacerlo. La definición de Mendigo en la entrada me parece muy adecuada para la parte de Akchoté: hay algunos buenos ingredientes, pero de ahí no sale un buen plato si no hay un buen cocinero, y Akchoté no parece serlo. Tiene técnica y parece saber lo que quiere hacer, pero tiene errores imperdonables. Que un músico de jazz no sepa en qué tonalidad está tocando un compañero y entre por donde le da la gana, aunque sea como echarle gaseosa a un St Emilion, me parece simplemente imperdonable. Ignoro si el comentario de Mendigo era válido para los dos, pero yo se lo he adjudicado a Akchoté directamente.

Luego está el asunto de la mezcla, que simplemente me parece que no va, son dos estilos que chocan y por eso cada uno toca lo suyo sin que sus caminos se crucen. De alguna manera este concierto me ha recordado al de hace la tira de años, de Paco de Lucía con John McLaughlin y algún tercer guitarrista de jazz, a veces Al di Meola, a veces Larry Coryell. Hace mucho que no he vuelto sobre aquellos conciertos, pero siempre me pareció que el esfuerzo de Paco de Lucía por acercarse a los otros músicos se debía más a su sabiduría y a los límites de los otros intérpretes que a otra cosa.

Por cierto, la música antigua sí mezcla bien con el flamenco, como bien se dedicaron a demostrarlo el grupo l’Arpeggiatta y Pepe Habichuela con estas Jácaras.





No hay comentarios:

Publicar un comentario