23 de octubre de 2011

Tolosa, el rugby y Nueva Zelanda

Hoy en Toulouse se nos ha acumulado la faena. En el centro había un maratón y no han podido instalar la macro pantalla gigante para retransmitir el acontecimiento más importante del mundo mundial y parte del extranjero: la final de la Copa del Mundo de Rugby entre Francia y Nueva Zelanda. Vaya por delante que soy un auténtico analfabeto en esto del rugby, tanto que a mí una de las cosas que más me interesaban del partido era… la haka del principio de los jugadores de Nueva Zelanda.

Ando estos días enfrascado ya en los preparativos de mi peregrinación anual al Certamen Coral de Tolosa, y la haka me trae recuerdos del año 1996 (cito de memoria y me puedo equivocar de año), cuando vino el coro New Zealand Youth Choir, que resultó un coro fabuloso, y que comenzaron su actuación con lo que podeis ver en este vídeo. Os aseguro que ver y escuchar esto en el teatro te pone a ciento y pico; cuando ves a unos tiarrones con las voces y los gestos que parece que te van a sacudir más de uno se quiso meter debajo de la butaca. Fue una gozada y el principio de un concierto muy bueno. Os dejo con esto que para mí es a la vez un aperitivo para Tolosa 2011 y un recuerdo de entonces.

2 comentarios:

  1. Pues en la Occitania el rugby se toma muy en serio, así que ya puedes ir aprendiendo. ;)

    Por cierto, un colega del equipo también estaba metido en una coral. Vaya vozarrón que tenía, se le escuchaban las instrucciones desde la otra punta del campo.

    Es un deporte precioso si se practica entre gente con honor. Pero luego, acabas jugando contra peña que entra al campo a desahogar sus malos instintos y, sinceramente, me piré. Tarde o temprano, acabas pasando por quirófano (rodillas, hombros...).

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  2. Y tan en serio. Esta mañana nadie hablaba de otra cosa. Tengo que reconocer que desde que vivo aquí me he aficionado bastante al rugby, aunque reconozco que a mis años ya me pilla tarde. Lástima que, de chaval, en el pueblo no sabíamos lo que era esto, porque con lo bestias que éramos nos hubiéramos divertido más que con el futbol.

    Por cierto, bienvenido a bordo Mendiño.

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